Europa se enfrenta a un bloqueo total, ya que la cuarta oleada de Covid trae consigo amplias restricciones incluso para las personas vacunadas.

Angela Merkel, la canciller alemana, dejó la puerta abierta a las restricciones de cierre al decir que se introducirían medidas “no especificadas” en los estados más afectados.

“Es absolutamente el momento de actuar”, dijo la señora Merkel, anunciando medidas que impidan a los no vacunados visitar bares, restaurantes y teatros si las tasas de hospitalización son demasiado altas. Si los índices del virus aumentan aún más, los gobernadores estarán facultados para tomar medidas más draconianas, incluso contra los vacunados.

La vecina Austria, que esta semana se convirtió en el primer país europeo en cerrar el paso a los no vacunados, mantuvo el viernes conversaciones sobre un cierre federal completo, en medio de informes no confirmados sobre cadáveres almacenados en pasillos de hospitales abarrotados.

Los estados de Salzburgo y Alta Austria entrarán en un bloqueo total de un mes de duración la próxima semana, independientemente del resultado de las conversaciones entre los líderes regionales y Alexander Schallenberg, el canciller conservador. El país tiene una de las tasas de vacunación más bajas de Europa occidental. El problema es aún más grave en algunas zonas del este de Europa, donde la corrupción endémica ha generado desconfianza en el sistema médico.

La Agencia Europea del Medicamento culpó el jueves a la gente que no se vacuna y a la variante delta de Covid de acumular presión en las unidades de cuidados intensivos. El Dr. Marco Cavaleri advirtió: “Estamos en medio de lo que llamamos la cuarta ola”.

En el Reino Unido se registraron 46.807 casos el jueves, la cifra más alta desde el 22 de octubre, pero las hospitalizaciones siguieron siendo bajas en comparación con el pico de la pandemia. Los índices del contagio entre los escolares han aumentado considerablemente, y las autoridades locales han recibido la facultad de imponer mascarillas en las escuelas secundarias.

En Francia, España, Portugal e Italia, los casos siguen siendo bajos pero están aumentando. En Alemania se registraron 65.371 nuevos casos -otro récord-, con una tasa semanal de 336,9 por cada 100.000 habitantes, ligeramente superior a la del Reino Unido.

Según los planes desvelados por la señora Merkel, las regiones alemanas introducirán restricciones en un sistema escalonado en función de la capacidad de los hospitales. El acceso a restaurantes, bares, gimnasios, cines y eventos estará restringido a quienes no puedan demostrar que están vacunados o que se han recuperado del virus.

En las regiones en las que la Covid está muy extendida, las personas vacunadas también tendrán que mostrar un test negativo reciente. Las regiones más afectadas podrían imponer cierres patronales u otras restricciones no especificadas a los vacunados.

Austria registró más de 15.000 nuevos casos el jueves, y tiene una incidencia de siete días de 989 por cada 100.000 habitantes, casi el triple que la del Reino Unido. Aproximadamente dos tercios de la población austriaca están totalmente vacunados, aunque la demanda de vacunas aumentó drásticamente esta semana tras la introducción de restricciones a los no vacunados.

Salzburgo y la Alta Austria tomarán medidas propias y cerrarán los comercios no esenciales, cerrarán las escuelas, salvo a los hijos de los trabajadores clave y confinarán a la gente en sus casas en condiciones estrictas. Un gerente de un restaurante en Linz, dijo: “Hemos estado cerrados durante siete meses: ¿qué hacemos ahora con nuestro personal?”.

Y un estudiante de 19 años, dijo que las medidas estaban justificadas pero que deberían haberse tomado antes. Y añadió: “Espero que podamos salvar la Navidad. Es malo que tengamos que quedarnos en casa otra vez, aunque nos vacunemos dos veces”.

Miles de personas salieron a las calles de Graz, la tercera ciudad más grande de Austria, el miércoles coreando consignas contra el bloqueo, y éste sábado está prevista una gran concentración en Viena.

Varios cientos de ciudadanos se reunieron frente a la embajada austriaca en París el jueves, temiendo que Francia pueda ser la próxima en volver a imponer restricciones. Emmanuel Macron insistió el jueves por la noche en que Francia no necesita seguir a sus vecinos europeos en la imposición de bloqueos a personas no vacunadas debido al éxito de su pase sanitario.

Manifestantes bloquearon el jueves una de las principales rutas de acceso al puerto de Rotterdam después de que Holanda introdujera un cierre parcial. Las tiendas y bares no esenciales están bajo toque de queda, y se aconseja a la gente que trabaje desde casa. Los visitantes del mercado navideño de Valkenburg, en los Países Bajos, tienen sus códigos QR Covid controlados

Holanda registró el jueves una cifra récord de contagios -23.680- por segundo día consecutivo, en medio de informes de que se estaba agotando el número de pruebas Covid y de que el gobierno quería prolongar las vacaciones de Navidad para frenar el aumento de los contagios entre los escolares. La semana pasada, el país impuso un cierre parcial, obligando a los restaurantes y pubs a cerrar a partir de las 8 de la tarde y prohibiendo los grandes eventos.

Eslovaquia, que tiene una de las tasas de vacunación más bajas de Europa, prohibió a los que no estaban vacunados acudir a restaurantes, eventos públicos o tiendas no esenciales. “Es un cierre para los no vacunados”, dijo Eduard Heger, el primer ministro. La República Checa ha introducido medidas similares.

El recuento diario de nuevos contagios en Italia pasó de 10.172 a 10.638. Los gobernadores de cinco de las 20 regiones del país están a favor de los cierres para los no vacunados, pero se enfrentan a la resistencia. Bélgica ha reintroducido el trabajo desde casa cuatro días a la semana en un último esfuerzo por evitar medidas más estrictas.

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